Como llevamos la semana??? Espero que bien!! ;)
Hoy comenzamos con otra autora que me gusta bastante y espero que a vosotr@s también, principalmente escribe novelas románticas contemporáneas, como la que traigo hoy, "Simplemente Irresistible" de Rachel Gibson.
Sinopsis
La bellísima Georgeanne Howard ha huido del altar al darse cuenta de que no quiere casarse con un hombre que podría ser su abuelo, por muy rico que sea. En la huida se topa con el atractivo John Kowalsky, que la ayuda a escapar sin percatarse de que en realidad la prófuga no es otra que la prometida de su jefe. Los dos se sienten mutuamente atraídos y pasan la noche juntos, incapaces de resistirse a la tentación. Pero este chico malo, que se encuentra en la cima de su carrera en el hockey, no pretende convertirse en el protector de nadie, salvo de sí mismo.
Cuando Georgeanne y John vuelven a encontrarse, ella se ha establecido en Seattle y ha tomado las riendas de su vida y él parece haber dejado atrás los días de desenfreno. Lo que John no se espera es descubrir que de aquella única noche que pasaron juntos nació una preciosa niña, Lexie. A la vez encantado y asustado por la noticia, el hombretón se esfuerza por entrar a formar parte de la vida de la pequeña. Georgeanne está encantada de cómo van las cosas en ese sentido, pero aunque ama a John desde el momento en que se entregó a él siete años atrás, quiere evitar a toda costa exponer de nuevo su corazón.
¿Habrá cambiado realmente el hombre que una vez la cautivó por completo? ¿Estará John dispuesto a darse una nueva oportunidad para demostrar que el amor que ahora siente puede durar para siempre?
Cuando Georgeanne y John vuelven a encontrarse, ella se ha establecido en Seattle y ha tomado las riendas de su vida y él parece haber dejado atrás los días de desenfreno. Lo que John no se espera es descubrir que de aquella única noche que pasaron juntos nació una preciosa niña, Lexie. A la vez encantado y asustado por la noticia, el hombretón se esfuerza por entrar a formar parte de la vida de la pequeña. Georgeanne está encantada de cómo van las cosas en ese sentido, pero aunque ama a John desde el momento en que se entregó a él siete años atrás, quiere evitar a toda costa exponer de nuevo su corazón.
¿Habrá cambiado realmente el hombre que una vez la cautivó por completo? ¿Estará John dispuesto a darse una nueva oportunidad para demostrar que el amor que ahora siente puede durar para siempre?
Crítica de Mariam
John Kowalsky es el capitán del equipo
de hockey de los Chinooks, en Seatle. A los veintiocho años su vida está
en declive, no precisamente a nivel profesional. Su carrera no puede ir
mejor tras su fichaje por el equipo de Virgil Duffy, sino porque su
vida personal se desmorona. Alcohólico y acosado por los remordimientos,
tras la muerte de su primera mujer, que se suicidó tras la muerte del
hijo de ambos, John no ha superado la culpa por casarse con una mujer a
la que no amaba y cuya inmadurez la llevó a acabar con su vida.
Así, su vida va de borrachera a
borrachera, mientras arrasa en las pistas de hockey y su fulgurante
carrera con los Chinooks despega.
Aún arrastrando la resaca de su última
borrachera, se presenta en la boda de Virgil Duffy, el dueño del equipo y
su jefe. Aburrido, decide marcharse antes de que empiece la ceremonia y
en el camino se encuentra con una joven vestida con un escueto y
ridículo vestido rosa que le suplica le ayude a escapar de allí.
Tomándola por una de las damas de honor, John accede y no es hasta más
tarde que descubre que en realidad la prófuga no es otra que la propia
novia.
Georgeanne Howard es una joven que a muy
temprana edad fue diagnosticada como disléxica, en realidad la
evaluación del psicólogo escolar habló de una "disfunción cerebral", lo
que para su abuela, que fue quien la crió, la llevó a inscribirla en una
escuela de señoritas donde, al menos, pudiera aprender algunas
habilidades que la ayudaran a conseguir un buen marido, ya que no
confiaba en que una joven con una disfunción pudiera ganarse la vida por
sí misma.
Georgie ha vivido con el estigma de
saberse diferente y sólo ha tratado siempre de agradar a los demás, a su
abuela, a su madre que la abandonó de recién nacida y a sus pocas
parejas. Cuando conoce a John cae inmediatamente enamorada de él. Tras
percatarse del error que supondría casarse con un hombre que podría ser
su abuelo, pese a la comodidad económica con que la respaldaría, huye
del que considera sería el mayor error de su vida y descubre en su
salvador al hombre del que por primera vez se enamora.
Tras pasar una noche juntos, John se
deshace de ella comprándole un billete de vuelta a casa, a pesar de las
lágrimas que empañan los ojos de Georgie. Sola, desamparada y una vez
más rechazada, la joven no abandona Seatle, sino que se instala allí y
decide de una vez por todas tomar las riendas de su vida.
Siete años más tarde, John y Georgeanne
(que decide dejar atrás incluso el nombre de Georgie) vuelven a
encontrarse en un cena benéfica, organizada por la empresa de catering
de la que ésta es copropietaria junto a su amiga Mae.
John queda paralizado al ver el
asombroso cambio experimentado por la joven con la que vivió una loca y
apasionada noche. Georgeanne, al contrario, queda impactada por el
inesperado reencuentro -pese a vivir en la misma ciudad- y lo evita como
si pudiera contagiarle la peste.
Pero John no se amilana ante la frialdad
de la joven y se persona en su casa, empujado por la curiosidad. Al
hacerlo, descubre el enorme secreto celosamente guardado por la joven:
la única noche que pasaron juntos tuvo sus frutos, una niña de seis años
llamada Lexie.
John pasa de la incredulidad a la furia y
después a una agradable sorpresa. Con treinta y cinco años, superado su
alcoholismo, y sabiendo que pocos años más son le restan como jugador
profesional, se ha planteado volver a casarse y tener hijos. Siempre
soñó con tener hijos varones a los que enseñar a jugar a hockey, pero la
pizpireta y locuaz Lexie, con unos enormes ojos azules idénticos a los
suyos, le roba enseguida el corazón.
John y Georgeanne no tienen otro remedio
que llegar a un acuerdo por el bien de la hija de ambos, lo que supone
que éste pase tiempo con la pequeña para vaya conociéndolo, aunque eso
implique tratar con su tentadora y esquiva madre, cuya presencia sigue
afectándole más de lo que quisiera.
Georgeanne no quiere volver a enamorarse
ni confiar en John, después de que le rompiera el corazón siete años
atrás, pero inevitablemente vuelve a cometer el mismo error.
Los miedos y dudas de cada uno son los
principales obstáculos a separar por parte de la pareja, así como la
velada amenaza de Virgil Duffy quien, al descubrir la existencia de
Lexie, obliga a John a elegir entre Georgeanne o su carrera con los
Chinooks.
Con Simplemente irresistible Rachel
Gibson nos adentra en la atmósfera de las competiciones deportivas de
hockey, tal como en Jane juega y gana. Aunque no nos describe el día a
día de los jugadores de elite o sus problemas deportivos y nos empape
tanto con la terminología o vivencias de los jugadores, el ambiente
competitivo y la dureza del mismo se perfila de tanto en tanto a lo
largo del libro. No obstante, la trama recae exclusivamente en cómo John
y Georgeanne batallan con sus propios demonios e inseguridades mientras
tratan de alcanzar un acuerdo por el bien de Lexie, la hija de ambos.
El papel de Lexie es primordial, ya que
con la particular visión que sólo un niño de seis años puede tener,
desgrana las intimidades de su madre y actúa como nexo entre sus padres,
reticentes a enamorarse.
Lexie es una niña parlanchina, pizpireta
y locuaz cuyas aventuras y desventuras provoca unas cuantas carcajadas,
y cuya sinceridad infantil lleva a situaciones vergonzosas para su
madre y su padre.
Una de los aspectos más entrañables de
la novela es ver cómo John "El muro" sucumbe al encanto de una niña de
seis años, lo que le lleva a vivir situaciones tiernas y emotivas y muy
divertidas. Es encantador ver a un hombretón rudo y mal hablado asustado
ante una niña de seis años, luchar por ganarse su confianza y cariño y
verse arrastrado por la alegría y "chantajes" de ésta. Ciertamente da
pie a escenas desternillantes.
Pero a la vez que se gana el corazón de
la pequeña, se gana el de Georgeanne, quien tras años de lucha y
sacrificio, ha vencido su vergüenza por ser disléxica y se ha esforzado
por superarse y ser independiente, sin estudios ni otra ayuda que su
propia voluntad.
Como secundarios nos encontramos con
Mae, la copropietaria de la empresa de catering y amiga de Georgeanne, y
a Hugh, compañero de equipo de John, quienes entablan una relación
plagada de choques y tiras y aflojas. Aunque está perfilada muy
escuetamente, da pie a momentos muy amenos.
Y sin olvidar al resto de jugadores de los Chinooks y la particular visión de estos sobre la vida familiar de John.
Simplemente irresistible es un novela
sencilla y tierna que gira en torno al reencuentro entre John y
Georgeanne. Ambos luchan contra sus sentimientos y contra el miedo a
darse una segunda oportunidad, no sólo por Lexie sino por sí mismos.
El libro garantiza escenas dulces y
emotivas cómo el paulatino acercamiento entre John y Lexie, o entre John
y Georgeanne, y los momentos divertidos y alocados que sólo la
mentalidad infantil de una niña puede crear.
Sin abordar una trama compleja, ni con
demasiadas pretensiones, sino con personajes humanos, que comenten
errores y luchan por superarlos, Rachel Gibson vuelve a regalarnos una
historia preciosa e inolvidable, de ésas que te dejan una sonrisa en los
labios al acabar su lectura. De ésas que quieres releer una y otra vez.
Sin duda, una novela a recomendar.
Valoración: Muy Bueno
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